sábado, 20 de junio de 2020

La verbena de San Juan, también se llama la Noche Del Fuego o la Noche de las Brujas. la celebración se hace la noche del 23 al 24 de junio, una de las noches más cortas del año debido a la proximidad de los Solsticio de verano.
Luces, diversión, fiestas la asusta suegras, petardos y cohetes, celebrando el verano que a comenzado y lo celebramos la noche de San Juan, con el corazón preso.
Gotas de sudor que resbalan por las mejillas rojas de calor, de un montón de hogueras encendidas que queman zarandajas sin valor.
Uno ha dado una silla, la madre un viejo tocador, el carpintero, una mesa destartalada, y yo, mi caballo de cartón.
Las llamas se elevan a la conquista de un muñeco de madera que justo en montón, controla esa gran batalla, donde bien sabe que será el último vencido. Ya sólo quedan las cenizas i un fuerte olor a quemado el viento se lleva, mientras los niñ@s alrededor de un general quemado. Y el verano apenas despierta, y aún, cuando termine, todos recordaran el espíritu emocionado y de alegría, de aquella noche, noche de San Juan.

SOLSTICIO DE VERANO.

Hoy 21 de junio vamos a darle la bienvenida al verano en el hemisferio norte, y con él se celebra el día más largo del año, en esta fecha el Sol se encuentra en el punto más alto del cénit, es su momento de máximo resplandor.
La celebración del solsticio es tan antigua como la humanidad. Según los antiguos mitos griegos, los solsticios eran “puertas” que se abrían para dar pa
so a la comitiva solar en su movimiento a lo largo del año. El año griego comenzaba en el solsticio de verano y este solsticio es llamado como; “La puerta de los hombres”, en cambio el solsticio de invierno del 21 al 22 de diciembre; claro está también en el hemisferio norte del planeta, es llamada como; “La puerta de los dioses”.
Desde luego tenemos que saber que hay ciclos, períodos temporales de carácter excepcional y sagrado en el que los potenciales de los elementos se aumentan, la vibración se expande y por lo tanto adquiere un grado mágico y energético, por ejemplo las fuerzas elementales de la naturaleza cobran mayor poder, de ahí que los elementos, el agua, el fuego, la tierra y el aire, como las plantas; la hierba de san Juan, el helecho, la verbena, el trébol, la artemisa, la salvia etc…, contengan más potencial en sus principios activos. Así bien, la celebración conjunta de la naturaleza, el hombre y las estrellas, tiene el poder de hacer efectivos todos los deseos, pero voy a ir un poquito más allá.
Esta fecha es muy importante y como individuos libres y conscientes podemos hacer de puente con las energías cosmo-telúricas y posicionarnos como el nexo que une dichas energías para armonizar el entorno, por lo tanto dirigir la fuente de amor hacia todos los puntos del planeta. El secreto del Sol es el secreto del amor, de la luz, de la información y nosotros podemos ser como bien dice Enrique de Vicente las agujas de acupuntura que filtran toda la luz-amor-información a las mismas entrañas del planeta para que la conexión del cielo y la Tierra y sus puertas, puedan ser conectadas.
Así que si de ti nace el hacer este trabajo durante este solsticio de verano, nada más tienes que entrar en tu corazón y desde él hacer que tu cuerpo sea el canal de amor y conexión.